En plataformas digitales la representación del Viacrucis en Unión Juárez y Cacahoatán  

Ramón García /CP 

Las representaciones del Viacrucis de Jesucristo que se realizan en Unión Juárez en las laderas del Volcán Tacaná, cerca de la frontera con Guatemala y que compiten en colorido, tradición y devoción con otras conmemoraciones a nivel nacional, se realizará en esta ocasión buscando que no haya aglomeraciones y con las medidas de sanidad ante el Covid-19, planean que esta sea transmitida a través de televisión por cable y por diversas plataformas digitales. 

En Cacahaotán, también en esta semana santa el comité organizador de la escenificación de la vida, pasión y muerte de Jesucristo en ese municipio, informó que cambiará su esquema de realización de la representación ante la pandemia del Covid-19, será en el barrio “Emiliano Zapata” y transmitido a a través de las redes sociales, para dar continuidad a esta tradición y que muchas familias puedan apreciarla desde sus hogares. 

Al igual que para los destinos turísticos de playa, el turismo religioso que genera la representación de la vida, pasión y muerte de Jesucristo representaba para Cacahoatán y Unión Juárez uno de los mayores ingresos económicos durante el año; sin embargo, las medidas tomadas por el gobierno implican medidas preventivas y sana distancia para evitar la cadena de contagio del Covid-19 y los grupos que organizan esta representación que se ha hecho por más de 50 años tomaron las decisiones del caso. 

Unión Juárez ha sido por años de los destinos más visitados durante la Semana Santa por turistas de diversos estados del país, Guatemala, Estados Unidos y Francia que aprovechan la naturaleza, las cabañas y el corredor gastronómico, a lo que se sumaba el turismo de aventura para escalar el volcán Tacaná, hoy habrá restricciones por parte de las autoridades. 

Pero la escenificación del viacrucis en la denominada “Suiza Chiapaneca”, un poblado de Chiapas ubicado a 45 minutos de la ciudad de Tapachula, enclavado en las faldas del Volcán Tacaná mantendrá viva la representación, el sincretismo religioso, en el que alrededor de 150 actores, protagonistas y personajes extras, participan con entusiasmo y fe celebrando el acto religioso.