Columna Sur 

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Héctor Narváez

Con o sin antecedentes

Los aspirantes tienen que librar el último filtro para que sean candidatos en estas elecciones.

Algunos, ya están sabedores del historial que arrastran y prefieren “tirar la toalla” antes de ser evidenciados.

Es el reto tanto para los partidos como para quienes buscan un cargo de elección popular: que no tengan antecedentes penales.

La purga necesaria

El tema ya lo abordó recientemente el Presidente AMLO desde “la mañanera”, al sugerir a la Fiscalía General de la República investigue a los aspirantes si cuentan con algún expediente o línea de investigación.

Aunque, se sabe que hay estados en donde las fiscalías y procuradurías están haciendo lo propio.

Como es el caso en Chiapas, en donde tengo información que están revisando los perfiles de quienes buscan ser candidatos en esta contienda electoral.

En el caso del municipio de Huixtla, estarían en la mira dos pretensos. Uno, que tendría una carpeta por desvíos que cometió cuando fue funcionario del Consejo Estatal de Seguridad Pública hace muchos años. Y el otro, le habrían encontrado tres expedientes con delitos federales, producto de su negocio y que fue el motivo para que se lo armaran 6 meses atrás.

Así también, hay versiones de que bajarían a otros aspirantes del PRI que traen una larga cola.

En Morena, el caso más relevante a nivel nacional es el de Félix Salgado Macedonio, aspirante a Gobernador por Guerrero, acusado de violación, acoso y abuso sexual a tres mujeres. Pero, parece que como es el candidato oficial de Palacio Nacional, no le harían nada, aunque se contradiga al discurso del Presidente.

Es necesario que se aplique “una purga” en todos los partidos, de aquellos que pretenden ser candidatos y tienen un historial negro.

El cáncer de todos

Por ley, quienes buscan un cargo de elección popular no deben de tener antecedentes penales.

Sin embargo, como ha pasado en los recientes procesos electorales, se ha repetido una y otra vez que algunos partidos postulan a quienes han cometido varios delitos.

En algunos casos, han logrado el amparo de la justica y hasta que sean borrados sus expedientes, por medio de acuerdo políticos.

Y la historia inmediata de México nos demuestra que esos personajes tan oscuros no deben de llegar al poder.

Un ejemplo claro es José Luis Abarca, el que fue el alcalde de Iguala y quien se encuentra preso por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. En Guerrero, se habla que estaba involucrado — antes de ser candidato del PRD, PT y Movimiento Ciudadano–, con el crimen organizado.

Así, en diferentes partes del país, han llegado este tipo de personas a ocupar un cargo público, ya sea como alcaldes, diputados locales, diputados federales y hasta Senadores.

Sucedió con el representante de Chiapas ante la Cámara Alta del Congreso de la Unión, Noé Castañón Ramírez, acusado por violencia intrafamiliar y por lo cual no podía tomar posesión. Lo salvó que el Tribunal Federal Electoral ordenara que le hicieran la protesta, además del acuerdo político de dejar al PRI y pasarse a la bancada de Movimiento Ciudadano.

Y muchos casos que se han registrado en todo lo largo y ancho del territorio mexicano, en donde se ha comprobado que tanto los partidos como los aspirantes, “se han pasado por el arco del triunfo” a la ley.

Que bien que el Presidente Andrés Manuel López Obrador haya pedido que la Fiscalía General de la República investigue a los pretensos si tienen alguna línea de investigación o expediente en su contra. Y que las fiscalías y procuradurías de los estados estén haciendo esa depuración entre la lista de los futuros candidatos. Pero, que no se les olvide que puede haber varios así en Morena, más con los que vienen de otros partidos.

Porque este es un cáncer que está en todos los institutos políticos. Y ninguno puede salvarse de que se puedan colar personajes oscuros.

Ahí está el desafío en estos nuevos tiempos: Con o sin antecedentes penales. Porque si les permiten a los que han cometido delitos llegar a ser candidatos, estarían cayendo en ser la verdadera “mafia del poder”.

Así que, partidos políticos de México, denle otra revisadita a quienes pretenden postular, antes de que sean linchados por los medios de comunicación y por los ciudadanos en las redes sociales.

Moraleja: Mas vale prevenir… ¡Qué lamentar!

Al margen: ¡Se destapa la cloaca!

La Unidad de Inteligencia Financiera de Hacienda Federal, que encabeza Santiago Nieto, empezó a investigar la publicación del periódico El País, en donde se dio a conocer que la hija de Manlio Fabio Beltrones depositó al banco de Andorra, más de 10 millones de dólares, algo así como 200 millones de pesos.

En este asunto, están involucradas 23 personas y quienes están relacionadas con el PRI. Se destapa la cloaca. ¡A ver quienes salen manchados!

Por último: ¡Ahora resulta!

El Subsecretario de Salud y responsable del Gobierno Federal ante la pandemia, Hugo López-Gatell, se molestó porque le sacaron las fotografías de su último paseo, a pesar de que se decía que se encontraba muy delicado de salud tras contagiarse de Covid.

Dijo que los medios solo lucran, mientras que los columnistas son morbosos. Y que esperan que suban de nivel. Ahora resulta. ¡Si él no ha tenido el nivel para atender la emergencia sanitaria!

¡Nos leemos el lunes!

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Foto: El País

 

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