Tijuaneros habilitan como terminal el parque del Malecón ante omisión de autoridades
Ramón García /CP
En plena vía pública y ante la vista de todos amparados en la omisión o complicidad de las autoridades de transporte, seguridad y salud para poner orden, una decena de deteriorados camiones turísticos dedicados al transporte de pasaje en la modalidad de “Tijuaneros” hacen base a un costado del parque del Malecón cerca de las instalaciones de la SSPM y el IMSS de donde parten hacia su incierto destino.
A pesar de no cumplir con las normativas de seguridad, vialidad y los protocolos de salud, los camiones son rentados exprofesamente para el traslado de pasajeros, cuyos boletos son vendidos por supuestas “agencias de viajes” que únicamente se dedican a comercializar boletos económicos tanto en Tapachula como Huixtla, y no ofrecen ningún otro servicio o destino.
En improvisados locales las supuestas agencias de viajes ofrecen los destinos desde esta frontera sur de México, para un tardado viaje a distintos puntos de la frontera norte de México, entre estos Tijuana, Sonora, Piedras Negras, Caborca, Ciudad Juárez, cuyos autobuses se han empezado a estacionar sobre la 14ª. Avenida Norte.
Extrañamente no se aplica la ley a esos camiones que no deberían hacer base en la calle y obligarlos a estar en lugares donde no provoquen problemas viales, de seguridad y, por la pandemia del Covid, de salud, tanto para la sociedad tapachulteca como de los mismos usuarios.
La irregularidad de este tipo de transporte que no da un servicio turístico sino de pasaje, es evidente y debería ser sancionado por las autoridades que omiten su responsabilidad y condicionan a los usuarios de este tipo de servicios, que presumen comprar en una supuesta agencia de viajes, que exclusivamente despacha boletos de los “Tijuaneros”, que ellos mismos contratan improvisadamente para enviar en estas deterioradas unidades a sus clientes, lo que implica que no haya de parte de la “agencia de viajes” responsabilidad alguna, ni del propietario del autobús, que generalmente porta placas de turismo y que constantemente va dejando varados a los incautos que compran el boleto incierto de un viaje.
El paisaje que se brinda en esos espacios públicos habilitados como terminales es patético, señaló una de las comerciantes que tiene su negocio frente al Malecón, no hay servicios sanitarios por lo que los pasajeros y familiares que van a despedirlos tienen que hacer sus necesidades fisiológicas en el parque o en la calle.