Cierran accesos a La Ventosa para evitar propagación de COVID-19
Julio 22 de 2020.- En La Ventosa, Oaxaca, autoridades municipales decidieron cerrar todos los accesos a la comunidad y dejar libre el paso en una sola calle a vehículos particulares y de transporte de productos, para evitar el ingreso de personas foráneas a la población.
De acuerdo con las autoridades de La Ventosa, la finalidad es evitar que el virus del COVID-19 se propague entre los habitantes y prevenir un contagio masivo.
Esto se sabe de la medida aplicada en La Ventosa
La Ventosa es una localidad de unos 7 mil habitantes y pertenece al municipio de Juchitán, Oaxaca. Las autoridades colocaron una cuerda de acero en las calles que colindan con las carreteras Panamericana y Transístmica para evitar el paso de vehículos.
- En otras calles que no están pavimentadas, con una maquinaria se abrió un hoyanco para impedir el paso de las unidades.
Solo quedó abierto un acceso que comunica a la población con la carretera Panamericana, donde se instaló un filtro para controlar quienes entran y salen de la comunidad.
La Ventosa se ubica a 15 kilómetros del municipio de Juchitán, donde en las últimas semanas han aumentado los casos de COVID y el número de fallecimientos.
- Las calles estarán cerradas por tiempo indefinido.
- Hasta hoy, Oaxaca registra 8 mil 949 casos confirmados de COVID-19.
José Vera Cartas, agente municipal, señaló que esta medida se aplica debido al contagio de coronavirus y al arribo de todo tipo de gente.
“Debido al contagio de la pandemia COVID-19 de lo que estamos sufriendo hoy en día ya se hizo mundialmente esta pandemia, en Juchitán tenemos varias definiciones, aquí sabemos que entra todo tipo de gente, hay empresas, hay comerciantes que vienen de otro lado, lo que queremos evitar es que se siga propagando esta enfermedad”. José Vera Cartas, agente municipal La Ventosa, Oaxaca.
- El cierre de calles afecta a proveedores.
“Prácticamente nosotros venimos aquí a surtirle el gas a cada familia, y esto pues sí nos perjudica tanto a nosotros, no nos permiten trabajar y a la gente más porque se van a quedar sin gas. (…) de repente se nos paró la patrulla atrás y nos dicen sabes qué se tienen que salir (…) porque no pertenecemos a esta población”. José Abel López, vendedor.
Con información de Rusvel Rasgado.