Piedrazos
Héctor Narváez
¿Vamos hacia una mortandad?
Los días pasan, las semanas también y así ya estamos terminando el cuarto mes de esta contingencia sanitaria.
Y la pandemia avanza a pasos agigantados en México, en donde hasta el momento no alcanza el pico más alto de contagios.
Por eso, hago la pregunta: ¿Vamos hacia una mortandad?
¿Qué pensarán?
Esa es la pregunta que ronda en la mayoría de los mexicanos, quienes han escuchado las declaraciones, por un lado, del responsable de atender esta emergencia. Y por el otro, del Presidente López Obrador.
Cuando se ve que el mandatario nacional llama a la población a salir –ya abiertamente—a las calles y no tenerle miedo a la pandemia, mientras las cifras de su propio Gobierno demuestran que cada día incrementen los casos.
Cuando vemos que Hugo López-Gatell anuncia que buena parte de los estados del país pasaron a “naranja” en el semáforo de salud y con lo cual les permite empezar a reanudar sus actividades, pero en las últimas tardes le ha tocado al Subsecretario reportar más víctimas que ha cobrado el coronavirus.
Ya nos mostraron la falta de capacidad y de seriedad a este grave problema, pero ahora lo que están haciendo no tiene nombre.
No estamos nada bien con la pandemia. Es más, nunca estuvimos bien desde un principio. Y a pesar de esto, desde Palacio Nacional como que decidieron adelantar las cosas y como que si esa fuera la mejor estrategia que tienen para superar esta situación.
Ya lo he escrito en este espacio anteriormente: como que esperan que surja “la inmunidad de rebaño”, o que el pueblo se sane por sí solo.
Pero, eso ni lo hacen en países del primer mundo, en donde los gobernantes luchan día a día para que la población no se exponga y corra el riesgo de morir.
¿Qué estarán pensando? ¿Qué es lo que traman nuestras autoridades mexicanas?
Malas decisiones
Pensar que la pandemia no golpearía tan fuertemente a nuestro país, fue el primer grave error que cometieron los actuales hombres en el poder.
Lo siguiente, es que intentaron que todo siguiera con normalidad, que “en México no pasa nada” –así como al estilo del PRI y del PAN que nos mal gobernaron–, cuando pasa y mucho.
Y después, aplicaron las medidas “a medias” de contención como “la sana distancia” y el “quédate en casa”, que en poco ayudó a detener el contagio.
Se supone que en este periodo, el Gobierno y el pueblo debieron aprender a tomar las medidas preventivas, pero como una gran parte de las autoridades, de todos los niveles, no actuaron con seriedad, menos lo iban a hacer los ciudadanos.
Lo último con que salió la administración de AMLO, fue lo que llamó “municipios de la Esperanza” y “la nueva normalidad”, que era una intentona de aventarles “la papa caliente” a los alcaldes y gobernadores, y lo cual tampoco pegó.
Los reclamos ahí están. Los casos se ventilan y son más conforme pasan los días. Y reflejan la negligencia de este Gobierno.
Los hospitales de todo el país, no se dan abasto. Los sanatorios privados así tampoco. Hasta los consultorios están a su máxima capacidad.
En los centros públicos de salud ya empiezan a escasear los medicamentos para atender a los contagiados. De la misma forma en las farmacias. Y los tanques de oxígenos, prácticamente no se encuentran, aunque se ofrezca pagarlos hasta en un 500 por ciento más de su valor normal en esta emergencia.
Porque sí, estamos en una emergencia. Y el Gobierno, de todos los niveles, se encuentra rebasado.
Rebasados, por las malas decisiones que tomaron desde Palacio Nacional, desde que apareció el primer caso en México.
¿Vamos hacia una mortandad? No lo sabemos. Pero, ahí están todos los contagios que se reportan a diario, como de los fallecidos.
Moraleja: México… ¡Tan lejos de Dios! ¡Y tan cerca del infierno!
Piedritas: ¡Se enferman más!
Ayer, el Fiscal de Justicia y el Secretario de PC de Chiapas, se reportaban como positivos a coronavirus.
Ambos funcionarios han tenido muchas reuniones por su trabajo y era lógico que contrajeran la enfermedad. Pero, ya son más los que se enferman en el gabinete estatal.
Por último: ¿Para eso quieren el poder?
El fin de semana, cuestionaron muy duro en las redes sociales al alcalde de Catazajá, José Luis Damas, mejor conocido como “El Peluches”, porque aseguran sus gobernados que nada hace para contrarrestar la inseguridad que azota a este municipio.
Como lo he escrito en esta columna: este edil ahora de Morena, junto con su esposa, ya llevan tres trienios. ¿Para eso quieren el poder? ¿Nada más para beneficiarse personalmente?
Comentarios: hectornarvaez@
Cel. 9642823259
Facebook: hector.narvaez.96