Piedrazos 

Héctor Narváez    

¡Y salió peor! 

Ha sido suficiente año y medio para que este Gobierno Federal mostrara su verdadero rostro.

Dice que es de izquierda, populista y cercano a las clases más necesitadas, pero la realidad es que eso se está volviendo un pretexto para justificar sus acciones.

Así, estamos viendo tristemente que salió peor Morena y Andrés Manuel López Obrador, que los anteriores.

“No les fallaré” 

La deuda internacional que se reveló desde la prensa, es algo que ya se rumoraba desde hace semanas en la Ciudad de México y que no daban crédito que eso pasara en esta administración “de la austeridad republicana”.

Y es tan solo una demostración de cómo se han manejado las cosas desde aquel diciembre del 2018, cuando llegó el nuevo inquilino a Palacio Nacional.

Por un lado, se busca doctrinar a las huestes desde las mañaneras, de que se ha emprendido una feroz lucha contra la corrupción y con aquellos que tanto saquearon al país, pero en el fondo se siguen haciendo las mismas cosas.

Lo hemos visto desde el 2019: en lugar de mejorar las condiciones de los diferentes sectores, ha ido empeorando. Incluso, para aquellas clases más necesitadas y que en la ideología iban a recibir más y mejores apoyos.

Lo primero que aplicó la izquierda en México, sin decir agua va, fue el recorte al presupuesto en rubros muy importantes, como la salud, cuyos recursos si se hubieran inyectado en la infraestructura de los hospitales, hoy tendríamos mejores resultados ante la pandemia.

Y encima del dolor y la desgracia de cientos de miles de ciudadanos, quizá hasta millones, se han cometido malos manejos en el erario: la compra de los respiradores artificiales al hijo de Bartlett y los contratos a las empresas de la familia del Director del IMSS.

Ahora, por si no fuera suficiente, cayeron en la peor de las contradicciones: si hubo endeudamiento internacional, a pesar de que juraba una y otra vez AMLO de que no lo haría y lo hizo.

“No les fallaré”, dijo en aquella toma de protesta del 2 de diciembre del 2018. Y al final, si nos está fallando y en mucho.

Cae el teatro 

Morena, ahora sí que tiene serios problemas. Y el Presidente, apenas ayer se dio cuenta del nivel tan lamentable a que han llegado, aunque va a seguir negando la realidad.

Como lo publiqué en este espacio hace semanas, el hoy partido en el poder tiene los resultados de encuestas serias en donde los números no son nada buenos para las elecciones del 2021.

Por eso, echaron a andar desde el Congreso de la Unión una agresiva campaña para revertir los ataques a Morena en las redes sociales, por el mal desempeño ante la emergencia sanitaria, pero fue en vano, porque nada lograron.

La clara señal de que andan “por la calle de la amargura” fue que la Senadora Lilly Téllez, quien ya había dado a conocer su decisión de salir de Morena y declararse independiente, se pasó al PAN.

Y así, ya se habla que otros Senadores y Diputados Federales harán lo mismo más adelante. En términos generales, se trataría de una desbandada del Movimiento de Regeneración Nacional.

Los que están en el partido en el poder, los que tomaron protesta con los ideales de la izquierda, ahora ya están pensando en abandonar el barco y buscar nuevos horizontes.

Pero, este es otro reflejo de que andan muy mal las cosas al interior de este Gobierno, que no ha aprendido a escuchar ni hablar.

Si de por sí ya estaba desgastada la imagen de Morena, con el endeudamiento internacional se vino a los suelos. Es más, se le está acabando la credibilidad a AMLO, quien un día dice una cosa y al siguiente la cambia.

Por algo es que ayer intentó dar uno de sus típicos golpes a la oposición, de que ahora se están agrupando como frente –lo cual no es nada del otro mundo, es más él lo hizo en su momento cuando buscaba la Presidencia–, pero demostró que está consciente de que va a perder las elecciones del año entrante.

No lo digo yo: las encuestas lo dicen y la población que cada día que pasa más se enoja con este Gobierno.

Se les cayó el teatro. Y en tan poco tiempo, demostraron que han superado a los del pasado.

Moraleja: Salió peor el remedio… ¡Qué la enfermedad!

Por último: ¿Y el OIC del IMSS? 

Mientras en el Hospital de Tapachula ya empezaron con la campaña de donación de plasma convaleciente de pacientes recuperados por COVID-19, el Órgano Interno de Control “brilla por su ausencia”.

No investiga si es que se dieron donaciones anteriormente y si el banco de sangre está al 100 por ciento de los indicadores, lo cual debe de ser certificado por la COFEPRIS.

Está bien que ya hayan reconocido este “método milagro” que puede salvar la vida de muchas personas que estén en riesgo de morir por esta enfermedad, pero que tampoco hagan las cosas a las carreras y sin cumplir con todo el protocolo. Ojalá que la OIC del IMSS actúe, emita un comunicado sobre el caso de Tapachula y también intervenga en todos los hospitales de esta institución en el país.

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