Por COVID-19, mujeres indígenas de los altos solicitan apoyos económicos, de salud e información
SCLC.- Cientos de mujeres indígenas de diferentes municipios de la región Altos de Chiapas; así como los municipios de Marqués de Comillas, Ocosingo, entre otros municipios, organizaciones de la Cooperativa Jolom Mayaetik (Tejedoras Mayas), del Centro de Formación y Capacitación de Mujeres (Cefocam-K’inal Antsetik) y de K’inal Antsetik (Tierra de Mujeres), reflexionan ante el contexto nacional del covid19, manifestando que como mujeres han estado sufriendo económicamente.
En un comunicado señalan que han estado en comunicación a través de celular, con mensajes y recorridos en diferentes municipios y localidades indígenas, así como otros medios de comunicación para llegar a las siguientes reflexiones sobre el impacto económico, social, político y por consiguiente de las violaciones a derechos humanos y de las mujeres ante el contexto del COVID19.
«Hoy, más que nunca constatamos los graves riesgos en nuestra salud por el COVID19, en las zonas indígenas y urbanas no hay condiciones para garantizar la debida atención acompañada de información y abastecimiento de productos de primera necesidad para las familias indígenas, a pesar de algunos esfuerzos de autoridades municipales para controlar los altos costos de productos de primera necesidad, maíz, frijol, azúcar y arroz, estos continúan subiendo de precio sin ningún control, no podemos dejar de buscar una forma de trabajo debido a las condiciones de pobreza y marginación, el lema: «QuédateEnCasa», lo comprendemos, pero quién va a cubrir la alimentación de nuestras familias, qué haremos las tejedoras, alfareras y bordadoras; así como otras mujeres campesinas, si no contamos con recursos económicos, para comprar lo más esencial en estos momentos: garantizar agua, jabón para lavarnos las manos, como tanto es anunciado en los medios de comunicación», informaron.
Indican que la venta de alcohol fortalece la violencia contra las mujeres y la población infantil, es urgente que las autoridades en sus tres niveles de gobierno, y particularmente la Secretaría de Salud prohíban su venta tanto en lo urbano como en zonas rurales, y que en algunos lugares se respeta, pero falta mayor supervisión, las instituciones gubernamentales como no gubernamentales que se coordinen para sumar esfuerzos y no permitir ningún acto de violencia contra las mujeres ni violaciones a derechos humanos de los pueblos originarios y las zonas urbanas.
«Las y los trabajadores de Salud, hoy los necesitamos en nuestras zonas rurales, debemos garantizar su libre acceso, respetarles y que nos respeten, ninguna autoridad municipal puede impedirles el paso para la atención, es indispensable la coordinación como pueblos originarios e instituciones de salud, para ello, debe equiparse a las clínicas médicas móviles con medicamentos básicos y equipo de protección personal para trabajadoras de la salud; así como concientizar en nuestras lenguas originarias el contagio del COVID19 a través de campañas en radio y medios de comunicación accesibles a estas regiones», cita la carta.
fredy morales