Se consolida programa de Fortalecimiento de Relaciones Parentales implementado en el PJE
- La finalidad es de sensibilizar a madres y padres que pasan por un proceso de separación, divorcio, pensión y custodia.
- Juntos o separados siguen siendo madre y padre: Isabel Karina Hernández Pérez
Tapachula, Chiapas. El Programa de Fortalecimiento de las Relaciones Parentales, que han venido implementando desde mediados del año 2019 los tres juzgados familiares del Distrito Judicial de Tapachula, ha tenido una respuesta bastante favorable entre sus participantes, así lo expone la jueza segundo del ramo familiar del distrito judicial de esa localidad, Isabel Karina Hernández Pérez.
“Este Programa de Fortalecimiento de las Relaciones Parentales, se basa en el análisis e inventario de recursos personales que cada madre y padre tienen que hacer, para empezar a entender la problemática y se convenzan de la importancia de dar pasos firmes en la relación filial para lograr una buena comunicación, que se base en el respeto, la tolerancia, la prudencia, solidaridad y el trabajo en equipo; y que finalmente aunque la separación física exista, la familia adopte otra forma y permanezca constante para las y los descendientes”, enfatizó Hernández Pérez.
Para la implementación de dicho programa que desarrolla la especialista en temas adherentes al cuidado y respeto de las niñas, niños y adolescentes, Lina Janeth Champo Aguilar, participan personas interesadas en la materia de salud mental, utilizando herramientas para la sensibilización como la lluvia de ideas, juegos para visibilizar las dificultades que enfrenta desde su postura cada persona o miembro de la familia que atraviesa durante un litigio familiar.
La jueza Isabel Karina Hernández Pérez manifestó que en algunas sesiones se proyectan películas con las que puedan analizar las diferentes formas de actuar del ser humano, desde las negativas como recurrir al uso de la violencia física, emocional, psicológica, sexual y económica; los abusos en los temas de custodia que pueden causar daños irreversibles en las niñas, niños y adolescentes; hasta las que tratan temas como el perdón y la liberación de las cargas emocionales, las cuales tienen la finalidad de sensibilizar la parte emocional que las y los menores de edad enfrentan en un divorcio o controversias familiares.
Es importante señalar, que este programa ha brindado grandes cambios positivos entre las partes del proceso jurídico, en esta fase no es abierto a público, cada juzgado familiar de Tapachula selecciona a un promedio de 30 expedientes donde la jueza o juez decide cuáles son los apropiados e indicados para participar en este curso, “la finalidad de este proyecto es que las madres y padres piensen y repiensen la noble labor que la vida les ha asignado, ya que aunque estén separados siguen siendo madre y padre”, aclaró la jueza.
Al concluir el curso, se agrega la constancia al expediente como evidencia del interés en mejorar esas relaciones, y se programan sesiones individuales y de pareja, las necesarias para abordar cada caso en particular, concluyó la jueza Hernández Pérez.