No habrá nuevos impuestos pero los cambios del SAT ponen a temblar a contribuyentes
México.- El compromiso se está cumpliendo, y respecto a la implementación de nuevos impuestos no ha habido sobresaltos en estos primeros días del 2020.
Sin embargo, la serie de cambios que ha establecido el Servicio de Administración Tributaria han puesto a temblar a muchos y a otros, a activarse y realizar cambios de fondo.
Especialistas han establecido que los cambios fiscales para este año establecidos por él, son los segundos en importancia tras la reforma en la materia de 2014.
Las modificaciones que se realizaron, se encaminaron a combatir la evasión, por lo que la autoridad fiscal tendrá mayores facultades para tener a los contribuyentes a raya.
Las reglas por lo tanto cambiaron y no sólo para los grandes empresarios, también para todos los contribuyentes que por error caigan en el supuesto de delincuencia organizada con la nueva ley antifactureros.
La Administración federal pretende recaudar 3.5 billones de pesos en impuestos para continuar con sus proyectos sociales.
El 1 de enero además entró en vigor la miscelánea fiscal y la reforma penal fiscal derivadas de las modificaciones a las leyes de los impuestos Sobre la Renta (ISR), al Valor Agregado (IVA), del Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), la Ley Federal de Derechos y al Código Fiscal de la Federación (CFF) que avalaron diputados y senadores.
Los errores saldrán caros, y una gran prueba se tendrá en las próximas declaraciones anuales, ya que un mal cálculo del impuesto te puede llevar a pagar penalizaciones que, en México, son intereses, recargos o multas. Estos pueden representar de 150% a 200% de la contribución o del impuesto omitido, advirtieron economistas.
Lo bueno, es que con estos cambios, más allá de que se pretenda afectar a los contribuyentes, se trabaja en beneficio de una mayor recaudación para el beneficio de los más necesitados, evitar la corrupción y poner un alto al crimen organizado con el flujo de capital derivado de acciones ilícitas.
línea directa